El Perú no debe ser inocente con Chile como lo son quienes
pretenden hacer negocio llevando las reservas de gas de Camisea a Chile. La
carrera armamentística que inició Pinochet y en la cual Chile ha superado en
una proporción de 7 a 3 al Perú tiene como único objetivo la expansión de Chile
y la búsqueda de reservas vitales que Chile no tiene: agua y gas. Si el lector
considera que un sector de la ultra derecha militarista chilena no tiene como
objetivo las reservas de Camisea nosotros exponemos dos razones para una
reflexión. En primer lugar Chile y Perú son países energéticamente aislados del
resto del continente porque mientras Ecuador, Colombia, Brasil, Venezuela,
Uruguay, Bolivia, Argentina y Paraguay están interconectados energéticamente
por medio de hidroeléctricas, oleoductos y gasoductos binacionales y
trinacionales, Perú y Chile no tienen gasoductos ni oleoductos internacionales.
(Ver mapa 1)
En segundo lugar, debemos observar con preocupación que las
últimas guerras en África y Medio Oriente desde la guerra del Golfo en 1990,
Iraq y Afganistán el 2003, y más recientemente Líbano, Libia, Siria y Palestina;
y en estos días el conflicto en Ucrania, están todas relacionadas con la
explotación y el transporte de gas. El mundo se acerca a un reordenamiento
determinado por el monopolio de las fuentes de energía.
La
guerra iniciada por Israel contra la Franja de Gaza el año 2009 tuvo como
objetivo geopolítico los yacimientos de petróleo y gas –bautizados como
Leviatán-, que se han descubierto en las costas de Palestina, Siria, Líbano y
Chipre. En cinco años esta costa del Mediterráneo oriental ha sido devastada
por la guerra. En enero del 2009 cuando Israel inició el sitio a la Franja de
Gaza, inmediatamente Rusia suspendió el suministro de gas a Europa,
principalmente a Ucrania. (Ver mapa 2) Esto en clara señal de amenaza a los países de la OTAN, aliados de Israel,
organización a la que Ucrania dudaba en integrarse.
Mientras tanto Turquía ha sido
perjudicada por la política expansionista de Rusia que impidió la construcción
del gasoducto Nabucco (por el rey de Babilonia) dejando percibir millones por permitir
que el gasoducto atraviese su territorio, (Ver mapa 3) que iba a transportar el
gas de Azerbaiyán a través de Turquía y hasta Austria con el objetivo de
reducir la dependencia de la Unión Europea del gas ruso y también la influencia
rusa sobre Asia Central. Por esta razón Turquía alienta la guerra civil en
Siria en contra del gobierno de Bashar Al Assad, impidiendo la construcción del
gaseoducto Irán-Irak-Siria, construido por la empresa de gas estatal rusa
Gazprom. Rusia ha hecho un tres raya que perjudica a Turquía. (Ver mapa 3) Esto
preocupa a Israel que observa cómo se le acerca la Rusia zarista. Esta es la
razón de la sangrienta guerra que ha destruido Siria, Palestina y Líbano.
UCRANIA SE DIVIDE: RUSIA OCUPA MILITARMENTE CRIMEA
Desde su independencia de la URSS en
1991, Ucrania ha tenido que maniobrar
entre Occidente y Rusia. Geográficamente, al igual que Polonia y la ex
Yugoslavia, Ucrania se encuentra en el límite entre oriente y Europa. El 2011
la rusa Gazprom hizo a Ucrania una conveniente oferta para de fusionarse con la
ucraniana Naftogaz. Rusia garantizó precios más bajos para los consumidores
ucranianos de gas, pero Ucrania lo rechazó. Ahora Gazprom exige a Ucrania el
pago de 900 millones de dólares por deudas.
La oposición golpista que derrocó al
gobierno pro ruso del presidente Yanukovich busca insertar a Ucrania en la OTAN
y en la zona euro, como parte del plan occidental para aislar a Rusia de
países dentro de la influencia eslava, como Polonia, Rumania, República Checa. Europa depende del gas de Rusia, no sólo
Ucrania, desde el punto de vista geopolítico y militar a Ucrania le conviene
entrar bajo la influencia de Rusia. Esta erala posición de Yanukovich. Pero la
influencia de los Estados Unidos entre la oposición es fuerte dividiendo al
país. Es posible que Moscú haya querido impedir el ingreso de Ucrania en la Unión
Europea, debilitando a los sectores pro occidentales ucranianos y tener un
pretexto para la guerra contra Occidente. En efecto, una vez perpetrado el
golpe de estado contra el gobierno pro ruso de Yanukovich por la oposición pro
occidental, Rusia ocupó militarmente la península de Crimea, territorio
ucraniano con población mayoritariamente rusa. ¿Fue una casualidad que Vladimir Putin
ofreciera asilo político a Snowden en la reunión del Foro de Países
Exportadores de Gas (FPEG) celebrada el 1 de julio? Rusia no admitirá un
régimen pro-occidental en el país más importante para su seguridad. ¿Dónde,
cómo y cuándo responderá a estas provocaciones? Quizás lo haga en Irán,
saboteando el acuerdo histórico firmado con Estados Unidos sobre su programa
nuclear, o en Polonia o Rumania, ambos dependientes al gas ruso.
LA GUERRA DEL
GAS
El bloque asiático de Rusia, China e Irán compraron gran parte
del gas actual y futuro disponible de Asia Central, dejando al gasoducto
europeo Nabucco, sin gas que transportar.Rusia construyó el gasoducto South
Stream (Corredor Sur) en 2007 para transportar el gas a Bulgaria, Hungría,
Eslovenia e Italia y, esquivó a Ucrania por si a EEUU se le ocurría utilizarle
contra Moscú. En 2011 trazó el Nord Stream (Corredor Norte) hacia Alemania,
desmintiendo la acusación de querer hundir a Europa. En respuesta Europa e
Israel proyectaron construir el gasoducto TANAP (Trans Anatolian Gas Pipeline)
que iría desde Azerbaiyán hasta Turquía. Con la destrucción de Libia y Siria
como Estados –a costa de la vida de millones de víctimas-, no habría problemas
para el transporte seguro y continuo de energía, esquivando además así a Rusia
e Irán.
EE.UU. detrás del golpe en Ucrania
EE.UU. busca impedir toda alianza o control de Rusia
sobre Ucrania. Una de las salidas podría ser la “yugoslavizacion” de Ucrania,
con imaginarias líneas divisorias étnico-lingüísticas (ruso/ucraniana) y
religiosa (ortodoxa-católica), como apuntó en 1996 Samuel Huntington, basándose
en el supuesto “choque de civilización entre los ucranianos orientales y los
occidentales”.