miércoles, 27 de noviembre de 2013

China ha tomado control de la economía peruana. Se apodera de la minería, gas y petróleo.

POR JULIO FERNANDO LATINOAMERICANO

CHINALCO SE RETIRA

Empresa china Minmetals se queda 
con Las Bambas



La empresa estatal china Chinalco, principal productor de cobre y aluminio en el gigante asiático, comunicó que se retira del concurso, en el que participa con la también china Minmetals, por la adjudicación del proyecto Las Bambas. De esta forma, la también estatal china Minmetals quedará como única postulante a Las Bambas.

Funcionarios del estado chino señalaron que Chinalco se retiró del concurso por la adjudicación del proyecto Las Bambas que sostenía junto a  su compatriota Minmetals contra  empresas occidentales interesadas en no perder sus inversiones en el Perú porque al ser ambas empresas del estado chino, el gobierno de ese país ha creído conveniente no poner en competencia a sus dos empresas. “No es una reflexión sobre Chinalco en sí; Minmetals ganó la competencia. La NDRC (la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China) tuvo que tomar una decisión para señalar un oferente preferido. No iban a permitir dos ofertas vinculantes”, señalaron.


$4.230 MILLONES  DE DÓLARES EN INVERSIÓN
Las Bambas aseguran economía peruana
por 15 años

Las Bambas fue el primer proyecto de Xstrata Copper en el Perú. Se encuentra a 72 kilómetros de Cusco, entre las provincias de Cotabambas y Grau, región Apurímac, a más de 4.000 m.s.n.m. Comprende las concesiones mineras de Chalcobamba, Ferrobamba, Sulfobamba y Charcas. Se prevee la puesta en marcha de esta operación minera para el segundo semestre de 2014, con una inversión de aproximadamente USD 4.230 millones.
Se calcula que en los primeros nueve años, la producción de cobre llegue a 400.000 toneladas de cobre metálico. Este yacimiento minero cuenta con recursos equivalentes a más de 1.700 millones de toneladas de cobre. Durante los dieciocho años de vida útil previstos para esta unidad minera, se calcula una producción anual promedio de 315.000 toneladas de cobre metálico en concentrados. En los primeros nueve años, la producción de cobre llegará a 400.000 toneladas de cobre metálico en concentrados anuales y 5.000 toneladas anuales en concentrados de molibdeno.

PETRÓLEO, GAS Y MINERÍA PERUANAS EN MANOS CHINAS
Gigante chino se apodera de economía peruana
PERO LA CRISIS NO ENTRARÁ Y MEJORARÁ LA ECONOMÍA

Gracias a la participación de las inversiones chinas en la economía peruana, especialmente en petróleo y minería, la crisis económica internacional no afectará al Perú de igual forma que a otros países de la región como  Venezuela o Argentina. Las últimas inversiones hechas por empresas chinas en el Perú, aseguran el buen rumbo de nuestra economía. Hace unos días la empresa estatal brasileña de petróleos Petrobras, vendió sus acciones en el Proyecto Camisea a la empresa estatal china de petróleos Petrochina. Del mismo modo, ayer se supo que una empresa estatal china definitivamente se hará cargo del megaproyecto Las Bambas, el más ambicioso de la historia del Perú.

El Perú de esta forma se convierte en el país con mayor inversión de capitales chinos en Suramérica. Pero no sólo China está invirtiendo fuertemente en nuestra economía. Capitales financieros de las potencias económicas de la cuenca del Pacífico ven en nuestro país un destino para sus inversiones. Las inversiones provenientes de Corea, Japón y Australia están fortaleciendo la economía nacional.
De esta forma, la economía peruana no se verá afectada por la crisis. A diferencia de Venezuela o Argentina, donde la situación económica no se estabiliza desde hace diez años, la economía peruana seguirá estando fuerte.
Sin embargo esta realidad tiene sus pros y sus contras. Los puntos a favor son, en primer lugar, la economía peruana no decrecerá, seguirá creciendo; en segundo lugar el comercio con la cuenca del Pacífico exigirá elevar nuestros niveles de industrialización, servicios, infraestructura, etc.; en tercer lugar el comercio, tanto exportaciones como las importaciones, se verá estimulado al máximo.
El gobierno del presidente Ollanta Humala será recordado por ser el gobierno en el que nuestra economía pasó a manos de China. Por eso la Gran Transformación no puede ser aplicada, significaría ir en contra de los capitales que mueven el mundo. El caso de Venezuela es muy diferente, porque a su economía que sólo subsiste del petróleo, no le queda otra salida que el rumbo que le dio Hugo Chávez.  El Perú tiene otras perspectivas.


PETROCHINA EXPLOTARÁ GAS DE CAMISEA
Brasileña Petrobrás deja su lugar en Camisea a empresa china
En contra de todas estas razones positivas tenemos una razón que resulta ser un punto de quiebre al parecer histórico en el área suramericana: la independencia económica de las potencias extranjeras. En efecto, para que la crisis internacional no golpee nuestra economía y evite su progresivo crecimiento es necesario que una economía más grande, China, reemplace a nuestros tradicionales socios que hoy están en bancarrota, Norteamérica y Europa. De esta forma, en el transcurso de los tres últimos años, China se  ha convertido en el dominador de la economía nacional. La empresa brasileña estatal de petróleos Petrobras hace unos días tuvo que retirarse para siempre del Perú vendiendo sus acciones de Camisea a la estatal china Petrochina. Contrariamente al proceso que siguen los países suramericanos, liderados por Brasil y agrupados alrededor de la Unasur, el Perú y Chile -Colombia recientemente ha demostrado diplomáticamente su urgente necesidad de una independencia jurídica internacional- parecen planificar su economía privilegiando el mercado y la competencia. Mientras Brasil terminó de pagar su deuda externa y más bien creó su propio banco para el fomento de desarrollo fuera de sus fronteras, Venezuela, Ecuador y Bolivia han proclamado su independencia económica de occidente, Ecuador y Venezuela apoyados en sus socios árabes de la OPEP, y Bolivia bajo la protección y padrinazgo de Argentina y  Brasil. Por su parte, los países rioplatenses son los más entusiastas promotores de la Unasur y de políticas progresistas de integración continental.