POR JULIO HERRERA AC&SE
El proyecto inicial, South Stream, llevaría gas a Europa desde Rusia por el mar Negro, Bulgaria, Servia y Hungría, desde donde pasaría a Europa Central.
Sin embargo este proyecto ha sido desechado debido a la intransigencia de Bulgaria, presionada por la OTAN y los Estados Unidos, que se oponen a la expansión de los intereses estratégicos rusos en Europa. Al negarse Bulgaria a que el South Stream pase por su territorio, Rusia anunció la cancelación del proyecto. (Enlace)
Además, Estados Unidos y los países occidentales tienen otros planes para abastecer de energía a Europa vía los Balcanes. Se trata del gasoducto Nabucco, competencia del South Stream, el cual tendría que atravesar Turquía para transportar a los Balcanes el gas procedente del Asia Central. (Enlace)
Para algunos, la renuncia de Rusia a la construcción de South Stream es el fin de "la primera guerra de gasoductos", iniciada en la década de los 90s, en la que compiten Estados Unidos y Rusia por llevar energía a Occidente desde Medio Oriente. (Enlace)
Ambos proyectos, South Stream y Nabucco, son anteriores a la anexión rusa de Crimea y al conflicto separatista en Ucrania. Habiendo concretado el "Anchluss" de Crimea, Rusia podría transportar el gas a través del puerto de Sebastopol y dirigirlo ya no hacia Bulgaria, sino directamente a las costas de Rumania en el mar Negro. El plan alternativo ruso ante la negativa de Bulgaria, satélite de la OTAN, sería llevar el gasoducto al corazón de los Balcanes: Servia y Bosnia, a Sarajevo vía Belgrado desde Rumania, haciendo una línea recta desde Sebastopol. El gasoducto South Stream no incluye Rumania ni Bosnia en su ruta. (Enlace)
En sus planes internacionales, Rusia habría esperado una mayor cooperación de Ucrania y Bulgaria, pero ambos países han demostrado estar políticamente comprometidos con la OTAN, la Unión Europea y los Estados Unidos. (Enlace)
MAPA DEL SOUTH STREAM. Línea recta que se traza desde Sebastopol a Rumania, Sarajevo y Belgrado. Nótese que en el mapa aún no se ha atribuido la anexión de Crimea por Rusia. JULIO HERRERA AC&SE
Recientemente se han visto acercamientos entre Rusia y Turquía, quien naturalmente se beneficia de su estratégica ubicación geográfica entre Asia y Europa. Al descartarse la vía Mar Negro-Bulgaria para el transporte del gas ruso, ha quedado abierta la posibilidad de la construcción de un gasoducto Rusia-Turquía-Balcanes, como una ampliación del gasoducto ruso-turco Blue Stream, que transporta 16 millones de metros cúbicos al año. De esta forma, Turquía se beneficia de dos proyectos, el redirigido South Stream ruso, y el original Nabucco financiado por los Estados Unidos. (Enlace)
EE.UU. BUSCA CORTAR INVERSIONES RUSAS EN MEDIO ORIENTE
“GASODUCTO ISLÁMICO”
Las razones detrás del Estado Islámico
POR JULIO HERRERA AC&SE
Detrás de la guerra en Oriente Medio hay razones económicas. Tras los
aspectos políticos, religiosos y militares se esconde el verdadero trasfondo
del conflicto, el control de la denominada “ruta de la seda”. La guerra civil
en Siria, iniciada el 2011 y la actual guerra que una coalición de países
islámicos y occidentales libran contra el Estado Islámico en territorio de Irak
y Siria, son el resultado de un sistema de intereses por controlar el paso de
hidrocarburos de Oriente Medio hacia Europa, “la ruta de la seda”. La guerra contra el Estado
Islámico, están retrasando la construcción del “gasoducto islámico”,
perjudicando económicamente a sus socios: Siria, Irak, Irán y Rusia. A continuación la opinión del especialista en seguridad y defensa, profesor Enrique Obando.
¿Cuáles son las otras razones “no visibles” de los aliados para estar presentes en el
Medio Oriente?
Como sabemos, en la actualidad se
está librando un enfrentamiento geopolítico por el dominio de las fuentes de
energía, en donde Estados Unidos busca liberar
a Europa de la dependencia que actualmente tiene del gas ruso, y Rusia por el
contrario, busca conservar dicho control. A su vez, Estados Unidos quiere
evitar que Irán exporte su gas a Europa e Irán busca exportar su gas para
fortalecer su economía. Sin embargo, para Washington es difícil romper la
dependencia europea de Rusia, ya que el gasoducto South Stream transporta 63
billones de metros cúbicos de gas al año, mientras que el gasoducto Nabucco,
que es la alternativa que Estados Unidos apoya para llevar gas de Azerbaiyán a
Europa vía Turquía, sólo exporta 30 billones.
En junio del 2011, Irak,
Irán y Siria anunciaron la construcción del denominado “gasoducto islámico” que partirá de los
yacimientos iraníes de South Pars, en
Asaluyeh, en aguas del Golfo Pérsico, para atravesar territorio de Irak,
y luego ingresar a territorio sirio hasta Tarsos, entregado en concesión a
Rusia. La Guerra Civil en Siria y el Estado Islámico están retrasando el
proyecto conjunto entre Irak, Irán y Siria, el cual es un negocio
multimillonario porque el mercado de Europa está asegurado debido a las escasas
reservas y la alta demanda. Sin embargo este proyecto tiene competencia. El Yacimiento de gas natural South Pars-North
Dome, situado en el Golfo Pérsico, es el yacimiento de gas más grande del mundo, y
es compartido entre Irán y Catar.
El lado iraní del yacimiento es South
Pars, y el lado catarí es North Dome. El
proyecto de Catar es llevar el gas a Europa por medio de un gasoducto que
atravesará Arabia Saudita, Jordania, e Israel, aliado de Estados Unidos, que
busca disminuir la influencia de Rusia en la zona. JULIO HERRERA AC&SE
¿Cuáles son los intereses económicos de EE.UU. Medio Oriente?
Las cosas se complicaron para los
norteamericanos cuando en junio de 2011 se acordó la construcción de un nuevo
gasoducto Irán-Irak-Siria para transportar 40 billones de metros cúbicos al año
de gas iraní desde Asaluyeh hasta Damasco, con una proyección al puerto de
Tartus y de allí bajo el mar Mediterráneo hasta Grecia. La fuente es el
yacimiento de gas de South Pars que queda bajo las aguas del Golfo Pérsico, en
la parte iraní, y que es, junto con el yacimiento de North Dome en la parte
qatarí del mismo golfo, el yacimiento de gas
más grande del mundo. A esto se suma el descubrimiento de yacimientos de
gas en la propia Siria. La exportación de esta inmensa cantidad de gas iraní y
sirio a Europa por el puerto de Tartus, que está concesionado a los rusos, es un
nuevo golpe para el plan norteamericano, ya que generará dependencia europea del
gas iraní y sirio, pasando por un puerto concesionado a los rusos. El hecho de
que Siria se haya convertido en un campo de batalla desde hace algo más de tres
años ha detenido el proyecto, lo cual es muy conveniente para los
norteamericanos e israelíes, ya que impide la venta de gas iraní.
De otro lado, la respuesta norteamericana
al proyecto iraní ha sido la elaboración de otro proyecto de gasoducto
alternativo que llevaría gas de Qatar a Europa. No se sabe a ciencia cierta las
cantidades a ser transportadas, pero se especula que podrían ser tan vastas
como para hacerle la competencia al gasoducto ruso South Stream. Quien propone
este proyecto es Frederick Hoff, coordinador especial para el Medio Oriente del
Departamento de Estado y miembro del
“Comité de Crisis en Siria”. La ruta del nuevo oleoducto partiría de Qatar, pasaría
por Arabia Saudita y Jordania. Uno de los ramales debe ir a Turquía para
liberar a este país del gas iraní, pero la única ruta es por Siria, de modo que
el gasoducto llegaría a Homs en
territorio sirio y de allí se dividiría en tres ramales, uno a Latakia, otro a
Trípoli en el Líbano y un tercero hacia Turquía. Qatar es entonces un gran
interesado en cambiar el régimen sirio para que no prospere el gasoducto iraní
y para que pueda pasar el ramal del gasoducto qatarí hacia Turquía. En esto
coincide con la política de Estados Unidos. No llama la atención que en este
emirato estén basadas fuerzas militares norteamericanas y británicas.
Mapa de la "ruta de la seda", sistema de gasoductos y oleoductos que transportan energía de Asia a Europa.